TAO – LA SABIDURÍA DEL SILENCIO INTERNO
Originalmente, el taoísmo puede considerarse una práctica chamánica. Sin embargo, el taoísmo es tan antiguo que su historia completa no se puede rastrear a través de registros escritos. El taoísmo es en gran medida una tradición que se transmite verbalmente de maestro a alumno a través de las generaciones. Debido a esto, algunas de las raíces chamánicas del taoísmo aún sobreviven en la actualidad. El taoísmo históricamente es también una práctica muy flexible. El taoísmo es una práctica de cambio, y siempre cambia para satisfacer las necesidades de los tiempos. Incluso mientras lees esto, el taoísmo está evolucionando para seguir el ritmo de la cultura moderna. La evolución constante es una de las razones por las que el taoísmo ha sobrevivido durante tanto tiempo; siempre se adapta con el tiempo mientras mantiene algunos conceptos clave para mantener la práctica fiel al Tao.
Para saber más sobre el TAO: Tao Te King de Lao Tse
La Sabiduría Interna
Piense en lo que va a decir antes de abrir la boca. Se breve y preciso, ya que cada vez que dejas salir una palabra, dejas salir una parte de tu propio Chi (energía). Así, es como se aprende a desarrollar el arte de hablar sin perder energía.
Nunca hagas promesas que no puedas cumplir. No te quejes, ni utilices palabras que proyecten imágenes negativas, porque se reproducirá a tu alrededor todo lo que hayas fabricado con tus palabras cargadas de Chi.
Si no tiene nada bueno, verdadero y útil a decir, es mejor no decir nada. Aprende a ser como un espejo: observa y refleja la energía a tu alrededor. El Universo es el mejor ejemplo de un espejo que la naturaleza nos ha dado, porque acepta, sin condiciones, nuestros pensamientos, emociones, palabras y acciones, y nos envía el reflejo de nuestra propia energía a través de las diferentes circunstancias que se presentan en nuestras propias vivencias.
Si te identificas con el éxito, tendrás éxito. Si te identificas con el fracaso, obtendrás fracaso. Así, podemos observar que las circunstancias que vivimos son simplemente manifestaciones externas del contenido de nuestra conversación interna.
Aprende a ser como el universo, escuchando y reflejando la energía sin emociones densas y sin prejuicios. Porque, así, siendo como un espejo, con un poder mental tranquilo y en silencio, sin darle oportunidad a tus opiniones personales de imponerse sobre tus deseos, y evitando reacciones emocionales excesivas, tendrás la oportunidad de tener una comunicación sincera y fluida.
No te des demasiada importancia, y se humilde, pues cuanto más te muestras superior, inteligente y prepotente, más te vuelves prisionero de tu propia imagen y vivirás en un mundo de tensión e ilusiones.
Se discreto y preserva tu vida íntima. De esta forma te liberarás de la opinión de los demás y tendrás una vida tranquila y benevolente, invisible, misteriosa, indefinible, insondable como el TAO.
No entres en competencia con los demás, la tierra que nos nutre nos da lo necesario para vivir a todos. Ayuda al prójimo a percibir sus propias virtudes y cualidades, a brillar. El espíritu competitivo hace que el ego crezca e inevitablemente, crea conflictos.
Ten confianza en tí mismo. Preserva tu paz interior, evitando entrar en la prueba y en las trampas de los demás. No te comprometas fácilmente, actuando de manera precipitada, sin tener conciencia profunda de la situación.
Ten siempre un momento de silencio interno para considerar todo lo que se te presenta y sólo entonces toma una decisión. Así desarrollarás la confianza en tí mismo y en la Sabiduría superior. Si realmente hay algo que no sabes y para lo que no tengas respuesta, acepta ese hecho. No saber es muy incómodo para el ego, porque a él le gusta saberlo todo, tener siempre razón y dar su propia opinión. Pero, en realidad, el ego no sabe, simplemente hace creer que sabe.
Evita juzgar o criticar. El TAO es imparcial en sus juicios: no critica a nadie, tiene una compasión infinita y no conoce la dualidad. Cada vez que juzgas a alguien, lo único que haces es expresar tu opinión personal, y eso es una pérdida de energía, es puro ruido. Juzgar es una manera de ocultar nuestras propias debilidades.
El Sabio tolera todo sin decir una palabra. Todo lo que le incomoda en los demás es una proyección de lo que no ha vencido en sí mismo. Deja que cada uno resuelva sus problemas y concentra tu energía en tu propia vida. Ocúpate de ti mismo, no te enganches con los demás. Cuando te enganchas, les estás dando demasiada importancia a las palabras de los demás y les das más fuerza a la agresión de ellos.
Si aceptas no engancharte, demuestras que las opiniones de los demás no te afectan, que son simplemente opiniones, y que no necesitas de su aprobación para ser feliz.
Tu silencio interno te hace imperturbable. Haz uso regular del silencio para educar a tu ego, que tiene la mala costumbre de hablar todo el tiempo.
Practica el arte de no hablar. Toma algunas horas para abstenerte de hablar. Este es un ejercicio excelente para conocer y aprender el universo del TAO ilimitado, en lugar de tratar de explicar lo que es el TAO.
Progresivamente con este conocimiento, desarrollarás el arte de hablar sin hablar, y tu verdadera naturaleza interna reemplazará tu personalidad artificial, dejando aparecer la luz de tu corazón y el poder de la sabiduría del silencio.
Gracias a esa fuerza, atraerás para ti todo lo que necesitas para tu propia realización y completa liberación. Pero hay que tener cuidado para que el ego no se logre infiltrar en tu proceso … El poder permanece cuando el ego se mantiene tranquilo y en silencio. Si el ego se impone y abusa de ese Poder, éste se convertirá en un veneno, que te envenenará rápidamente.
Mantente en silencio, cultiva tu propio poder interno. Respeta la vida de todo lo que existe en el mundo. No fuerces, manipules o controles al prójimo. Conviértete en tu propio Maestro y deja que los demás sean lo que tienen la capacidad de ser. En otras palabras… vive siguiendo la vía sagrada del TAO.
